sábado, 7 de marzo de 2009

Bastante perjudicado

La primera vez que pude escuchar a mi tristeza tenía 14 años.
El barrio estaba en fiestas. Mis padres habían salido a vivir el ambiente, pero yo no tuve ganas. Sólo en casa, vino y la recibí. Se agarró a mi pecho y me animó a llorar.
Las lágrimas me aclararon la visión.

Hay fiesta. Me atrae irresistiblemente, me acerco con prisa. En la pista bailan las parejas y eso es la felicidad. Pero me quedo en un margen. Me conformo con mirar extasiado, sin contemplar más posibilidades.

Tan tierno y ya tan perjudicado.
La tristeza vino a avisarme. Nunca es tarde, me dijo, despidiéndose muy despacito.
Hace mucho daño, pero es leal.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Ya ves... la tristeza "nunca te abandona" (como el desodorante) en los malos momentos, siempre "está ahi" para lo que sea...

Al final tendriamos que darle las gracias y todo por no fallarnos...

En fin...vamos a olvidarnos de ella por un ratito y a disfrutar...(aunque en el fondo siga estando a nuestro lado)

Besos!

Luna dijo...

Uy...tristeza si...que dolorosa es y que difícil se nos hace desprendernos de ella...la verdad esque es la compañera más fiel...tiene narices que lo que necesitemos sea la felicidad y la que nos pise los talones sea la maldita tristeza...
enfin es la vida asi no?...o eso se supone
lo que más necesitas es lo que más cuesta cosneguir y sin embargo aquello de los que quieres desacerte...te persigue por los siglos de los siglos...
enfin manu...un beso y aniiimo

Camaleona dijo...

No tan leal... a veces se va y por más que la llames ya no quiere volver...

Manu dijo...

Ana, no me hagas mucho caso.
Hay momentos para todo, y creo tu estás ahora en otra cosa y te toca disfrutar.
Salud.

Luna, tiempo atrás me he defendido mucho de la tristeza. Ahora me defiendo menos y me va mejor.
Gracias por ese ánimo.

Manu dijo...

Camaleona, ¡qué loca estás!

* Sine Die * dijo...

Cohabita con ella pero delimítale el espacio en tí...

Yo lo hago.

:)

Besitos..

Manu dijo...

*SINE DIE*, quiero no hacerlo. La tristeza habla claro, me ha dicho que disfruta cuando puede disiparse y que la disiparé mejor cuanto más baile. ¿no es maja?
Ahora tengo que lidiar con el miedo que me va diciendo a la oreja: 'es peligroso'.

Muchos besitos

gla. dijo...

A mi la tristeza me es leal,pero tengo algunos momentos de intensa felicidad...y hay una felicidad que no se va...aun cuando la tristeza me visita...

Manu dijo...

Gla, suena bien.
Un buen fondo de armario.

A propósito de visitas, gracias por la tuya.