miércoles, 25 de marzo de 2009

Descansando

Han sido dos semanitas de puta madre.
Sexo a mogollón. Soy un volcán, a la mierda la modestia.
Además de sexo nuevas amistades, alegres, inteligentes. Días vibrantes.

Extenuado y satisfecho me retiro.
Y en eso ando estos días.
En el duermevela del sofá, a mis anchas, me vienen los viejos tics, quejas antiguas. A la mierda también.
Ahora no quiero otra cosa que descansar, y cuando descanse quiero volver a jugar y estar alegre.

miércoles, 11 de marzo de 2009

Un poco más

Como sé que puedo hablarte claro te diré que sí, que las tías echás p'alante me acojonan un poco.
Guardo una prudente distancia de seguridad y si además me gustan, me convierto en mirón. Se me van los ojos pero procuro que ellas no lo noten. Sería ideal tener un agujerito.
Pues bien, ya tengo el agujero y miro todo lo que ellas quieren enseñar.
Hoy he decidido que voy a hacer algo más.

sábado, 7 de marzo de 2009

Bastante perjudicado

La primera vez que pude escuchar a mi tristeza tenía 14 años.
El barrio estaba en fiestas. Mis padres habían salido a vivir el ambiente, pero yo no tuve ganas. Sólo en casa, vino y la recibí. Se agarró a mi pecho y me animó a llorar.
Las lágrimas me aclararon la visión.

Hay fiesta. Me atrae irresistiblemente, me acerco con prisa. En la pista bailan las parejas y eso es la felicidad. Pero me quedo en un margen. Me conformo con mirar extasiado, sin contemplar más posibilidades.

Tan tierno y ya tan perjudicado.
La tristeza vino a avisarme. Nunca es tarde, me dijo, despidiéndose muy despacito.
Hace mucho daño, pero es leal.

viernes, 6 de marzo de 2009

Con otro nick

La leo. Sigue llorando y esperando. Me llama cruel porque no le hablo. Crueldad sería gozar con su sufrimiento. Y no, pero ahí me da en un flanco débil. Soy responsable de ir, amarla y luego marcharme. Pero si me dice 'sufro por tu culpa' me tambaleo.

Sí soy crudo porque no quiero hablarle. Pero tampoco quiero quedarme callado. En mi rincón ya ha pasado lo peor de la tormenta y salgo de la cueva. Me ve ir y venir por los blogs, hablar, soltar paridas y eso debe dolerle.

Ya me despedí, volver a hacerlo sería un juego tonto que ya sé como acaba, y no quiero acudir como un alma caritativa, esa no es nuestra historia, ella tampoco me recibiría así.

Me pregunto qué coño quiero, por qué no dejo de ir a verla, aunque sea de incógnito.

No quiero que sufra, quiero que no me olvide.

miércoles, 4 de marzo de 2009

Si eres mujer

Todo esto que está pasando me ha situado en la órbita del amor desbocado.
Tengo todo el día el corazón y el pene latiendo fuerte, irradiando. Van más juntos y tienen más presencia que nunca antes. Llevo así unas semanas. Estoy en celo.

Si eres hombre, bienvenido, tu dirás.
Si eres mujer, adelante, pero has de saber que desde ya me pirro por conocer tu sonrisa, imaginarte de pies a cabeza, acariciarte, penetrarte y decirte cómo me alegra que hayas venido.
Virtualmente me colmas.